Voces de la Calle: J
Jámila. «Al viejo le obsedía una idea: «¡Huesos, los huesos que vender!» Idea salvaje, descarnada, hediente a humores de pudrición. Pero dijo: -Ve, hijito… -de pronto, reintegrándose-. Ve, Celia, cómo va quedando el casco de la embarcación. Todo lo expresó con exclamativo agrado, casi con felicidad, tratando de matar los gérmenes inhumanos, con sabor de jámila, que …