Breve historia de la Natación y Waterpolo

Como no hay duda en eso de que los iquiqueños somos también hijos del mar, y que buena cantidad de sangre de los changos corre por nuestras venas, entonces tendrá que ser cierto aquello que hemos de ser bueno para el mar. Más aún, es casi una obligación que gente del Morro por ejemplo, primero tengan que aprender a nadar antes que a caminar. Y claro, no puede ser de otro modo. Si  para los morrinos el mar, viene a ser como el patio de sus casas. Y los botes como los triciclos para aquellos que viven un tanto alejado del mar. Se cuenta que un hombre de excepcionales condiciones física como Benigno Jacques, a quien le decían Supermán, y que practicó también boxeo, cuando estaba aburrido se lanzaba a nadar mar adentro. Horas y horas le duraba la entretención. Los iquiqueños de hoy aburridos, nos vamos a la Zofri o al centro.

Gente del Morro, del Norteamerica, del Boca Juniors y de la Academia de Educación Física, que vive casi pegada al borde marino, hizo de la natación y del waterpolo su deporte favorito. Y para realizarlo no necesitaron la piscina. Para qué , si el mismo mar con la calma que goza algunos días era una perfecta piscina. O bien en su propia configuración natural habían piscinas por doquier. Al lado de donde hoy está la piscina Alcalde Godoy, existió La Serena, una playa natural que se prestaba para los deportes marinos y que hoy ya no existe. O bien, la playa de El Morro, el Bellavista de idénticas características.

Una carta bajo el agua

En eso de saber acerca de los orígenes de la Natación y del Waterpolo en Iquique, tuve la ocasión de conocer a don Gustavo Araneda Santander, quien fuera por muchos años secretario de la Asociación de Natación de  Iquique. El, en  amena conversación,  me entregó la siguiente carta, que en extenso publicamos porque ella nos entrega valiosa información acerca de este deporte. Entre las partes destacadas dice:

Los principales párrafos que nos entregó Rolando Araneda Contreras, tío del suscrito y contemporáneo, entre otros,  de Ramón Candina, Eduardo Chandía y José Venegas, quienes dieron vida al club Jorge V, son los siguientes:

Y más adelante la carta:

Santiago, 22 de Abril de 1953

Estimado Sobrino:

Tu carta ha sido una grata sorpresa y ha tenido la agradable virtud de evocar gratos recuerdos.

Con respecto a Manuel Arancibia me acuerdo muy bien de él, máxime que fue uno de mis primeros y más apreciados amigos; cuando él vivía en Gorostiaga, yo lo pasaba a buscar para irnos juntos a la Escuela Santa María.

Sobre la natación te puedo dar los siguientes datos: Durante los años 1923-1924, un grupo que encabezábamos con Oscar Ramos empezamos a practicar waterpolo en las aguas cavachinas. Como no conocíamos la reglamentación, jugábamos más bien por intuición, hasta que Ramos logró conseguir un reglamento de la Asociación de Natación y Waterpolo de Chile.

Me di el trabajo de sacar más de 30 copias a máquina y empecé a entusiasmar a otras instituciones, además de la Academia de Educación Física, a la cual pertenecíamos, porque había nacido en mi fundar la Asociación de Natación y Waterpolo, Primera Zona, para tener un organismo oficial que nos dirigiera; todos trataban de disuadirme, pero encontré gente entusiasta en varios clubes y en 1925 fue fundada la Asociación , la que, por una simple cuestión de amor propio de los delegados que quisieron ponerle Asociación de Natación y Waterolo de Tarapacá, contraviniendo con ello una disposición reglamentaria, que permitía más asociaciones que la de Chile y que separaba al país por zonas y no por asociaciones, nos impidió ser reconocidos oficialmente.

Fue ingente el trabajo que costó; pero seguimos trabajando, sesionábamos en el Manuel Sánchez y en la Academia; hombres entusiastas que se destacaban fueron Luis Rivera M., Spiro Coydan, Humberto Howard y algunos otros injustamente olvidados. Por ese entonces llegó a Iquique Eduardo Chandía jugador internacional de los registros del Jorge V de Valparaíso, su arribo fue de mucha utilidad, ya que de él aprendimos mucho de lo que debimos enseñar y que, por su carencia de egoísmo y su espíritu de sacrificio, conquistó la simpatía de todos los que fuimos sus compañeros.

En 1925, para las Fiestas Patrias, fue la primera presentación en público de waterpolo.

Siendo presidente de la Academia don Guillermo Wilson, llegó hasta mí para decirme que había sido nombrado miembro del Comité Organizador de las Fiestas Patrias y que él deseaba crear algo nuevo que saliera de la trillada rutina de los juegos populares; tomando la ocasión por el cabello, le prometí presentar encuentros de waterpolo, costándome trabajo convencerlo que no sería un fracaso.

Como habíamos hecho poca propaganda de prensa, nos batíamos con circulares y visitas, así pocos estaban al tanto de nuestros progresos.

Presenté tres encuentros entre equipos del Manuel Sánchez B. C., All American Cables, Unión Morro y Academia, siendo los dos últimos los protagonistas del encuentro de fondo.

Nadie pudo imaginar el enorme interés que despertó en el público iquiqueño; la cancha la armamos en el muelle de pasajeros, frente a la Gobernación, fue tal la afluencia de público, que lo topaba todo, muelle, techos, torres y hasta el mar, por los alrededores de la cancha, estaba cubierto de embarcaciones llenas de gente; tuvo que, con fuerza de policía, impedirse el acceso a más público.

El encuentro de fondo se definió a favor de Academia, 4 por 0, derrota que supo vengar muy bien,  posteriormente, el Unión Morro.

Academia formó así, si mal no recuerdo: al arco, Alfredo Cicarelli; backs, Ernesto Medel y Carlos Straube; half, Rolando Araneda; delanteros, Eduardo Chandía, Jimmy Hoggs y Oscar Edding. De Unión Morro sólo me acuerdo de algunos pocos, es que han pasado casi 30 años.

Siguió después un período muy activo, hubo muchos clubes afiliados como Societé Sportiva Italiana, Colo Colo, Universal, Cambrasso, Jorge V, etc.

Hasta que al fin decidimos retirarnos para que la Asociación se transformara en Primera Zona, empezando a actuar entonces el señor Cuthbert y yo me dediqué a otras ramas. Hubo muchos acontecimientos, hasta semi trágicos algunos, pero como me tocó actuar  intensamente, lo omito para evitar el autobombo.

La prensa de la primavera y verano del año 1925, podrá darle más datos.

Eduardo Chandía está actualmente en la Oficina Victoria y Manuel Arancibia debe conocer a Mr Cuthbert, pueden conversar con ellos y completar esta historia.

Dale muchos saludos a Manuel y en lo que guste, que cuente con la atención de su viejo amigo.

Rolando Araneda C.

Hay que agregar además de lo anterior la figura de Luis Estal R, quien en 1927 quebró el record de los 50 metros libres con un tiempo de 34″ en infantil. Con ello superó la marca nacional del porteño Raúl Montero. Además del nadador del Norteamérica, Amador Segundo Rojas, batió el récord de los 100 mts, estilo libre, juveniles, que tenía Alberto Hurtado (El Tarapacá, 26 de enero de 1932, página 7).

De nuevo el muelle de pasajeros

Hasta hace unos diez años atrás, se volvió a usar de nuevo el muelle de pasajeros para la práctica del waterpolo. Los más osados,  emprendían verdaderas maratones por el mar,  nadando desde el Morro hasta Cavancha. En la actualidad,  con ocasión del carnaval de El Morro, cada año se hace esta maratón. Todo ello, toda esa actividad marina, natural a la gente del mar, debía tener como resultado el éxito. 

Asi por ejemplo, el año 1935 en Santiago, el equipo de Iquique se corona vice-campeón nacional en Waterpolo. El equipo estuvo compuesto por Agustín y Alberto Solari, José Oalia, Carlos y Oscar González y Atilio Magnasco. Se empezaba ya un camino de triunfos.

El año 1950 la Revista Estadio escribió:

El último Campeonato Nacional de Natación ha venido a demostrar que las provincias disponen de un material humano precioso para el renacimiento de ese deporte, tan venido a menos en los últimos años. Con muy pocas excepciones, fueron iquiqueños y talquinos los nadadores que señalaron las mejores marcas, y fueron ellos precisamente, los que dieron una relativa jerarquía al torneo e insinuaron un repunte a todas luces saludable. Bernardo Solari, Italo Cuneo, Patricio Elgart, Sergio Montoya y Alberto Danioni compitieron en representación de asociaciones  del norte y del sur del país. Hernán Avilés, inscrito por la Asociación Universitaria, es también originario de Iquique.

… En Iquique y Antofagasta, para mencionar sólo las ciudades más importantes, hay muchos nadadores. Muchachos que van a la playa durante la mayor parte del año, y que disponen de las facilidades que da el clima. Pero estos nadadores en potencia no pueden, muchas veces, convertirse en verdaderos competidores deportivos (Revista Estadio Nº 355. 4 de marzo de 1950).

La materia prima iquiqueña estaba a mano, lo que el cronista deportivo reclamaba era  el apoyo técnico. Sin embargo, la siguiente nota habla de la perfecta conjunción entre materia prima y apoyo técnico:

En el XXIV  Campeonato Nacional de Natación sobresalió Bernardo Solari. Desde el año 1942 que no se nadaba en Chile los 100 metros estilo libre en 1’02» 1 /10, tiempo que obtuvo el iquiqueño Bernardo Solari. Desde 1938, en plena época de oro, no se había señalado 2’23 5/ 10 en 200 metros estilo libre. Lo curioso es que Solari en esa época era sumamente joven (Revista Estadio Nº 355. 4 de marzo de 1950).

El día domingo 19 de febrero del año 1961, Iquique de nuevo triunfa en el  Nacional de Natación en Santiago, concretamente en el Stade Francais. Iquique obtiene dos campeones de Chile, Rosario Torres y Ramón Ahumada. Seis vice-campeonatos, logrados entre Juan Gutiérrez, Ramón Ahumada, Rosario Torres y Douglas Zaviezo. Además destacaron W. Delucchi y Enrique Lombardi.

El año 1962, para ser más preciso en marzo, Iquique concurre al Nacional en Santiago. El de la versión número 25.  Douglas Zavieso se corona campeón de Chile, en los 100 metros de espaldas infantil. La prensa digo que Zavieso era la continuidad del » Pescado» Lamas. A la larga lista de campeones agreguemos a Charles Guerrero, campeón de Chile en los 100 metros.  Y más atrás en el tiempo a Hugo Godoy Yovich del Norteamérica, también  campeón de Chile.

El día 6 de marzo de 1940, Alfonso Alcaide del Norte América se corona campeón zonal, en 100 metros espalda.

En marzo de 1958, Ramón Ahumada obtiene el record en natación, en categoría infantil.

En damas también destacaron: Alicia Aenishanleins. Drina y Elsa Mitrovic. Erna Schoolder.

Campeones de Chile en Natación

Categoría Infantil

Nombre                                                        Estilo

Bernardo Solari                                          LIbre

José Lamas                                                Espalda

Hugo Godoy                                                Mariposa

Italo Cuneo                                                  Libre

Categoría Juvenil

Rodolfo Torrico                                           Libre

Bernardo Solari                                          Libre

Carlos Márquez                                          Libre

Primera Categoría

José Lamas                                                Espalda

Mario Pinto                                                  Clásico

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *