Este instrumento de percusión proveniente del mundo árabe y probablemente ingresado a estas tierras por los esclavos negros, le otorga a los Morenos su aire distintivo. Nada más escuchar su sonido entendemos que los Morenos están danzado y cantando. El caporal al agitar la matraca sobre su cabeza indica el comienzo o el fin de la danza. La matraca es parte del cuerpo de los Morenos. Le puede faltar todo, pero no su matraca. Un Moreno sin ella, está incompleto.