Entre el 18 y 19 de febrero los disparos entre los bandos revolucionarios y gobernistas ocasionaron un incendio en Iquique. El fuego se inició por un costado del edificio de la Aduana, que estaba lleno de salitre; se quemaron cuatro manzanas de viviendas.
En el «Combate de la Aduana», en la que la Armada se insurrecciona contra el gobierno de Balmaceda, se menciona la heroica acción de Andrés Tassara y otros voluntarios de la Compañía Italiana Ausonia Nº 4, del 16 al 27 de febrero de 1891. En el libro Siamo Tutti? Italianos en Iquique, se entrega el siguiente relato, en donde se constata:
«.. la casi imposible la labor del Cuerpo de Bomberos, de extinguir los numerosos incendios en la ciudad provocados por los combates entre las partes beligerantes. Muchas veces la tropo disparaba contra los bomberos o los amenazaba directamente con sus armas para que se detuvieran en su afán para apagar los fuegos, pero éstos no se amilanaban y seguían una y otra vez con su labor, que además de las amenazas trabajaron bajo la lluvia de proyectiles que caían» (Di Caro y Alvarez 2000: 130).
Tomás Capella dice:
«Durante este tiempo el combate continuaba encarnizado y el lugar que teníamos forzosamente que ocupar era acribillado a balazos por haber estado hasta hace pocos momentos antes ocupados por tropas; tres veces consecutivas nos vimos envueltos en los torbellinos de escombros y fragmentos que levantaban los proyectiles al hacer explosión» (Di Caro y Alvarez 2000: 130).