A la sombra del pino oregón del Liceo de Iquique
Por Gustavo Fiamma Olivares
“El Liceo como segundo hogar, hogar que como el propio hay que querer y respetar”
(Romeo Salinas 1893-1953)
1.-Primeros pasos del joven profesor. Nuestro Rector inició su carrera como profesor e inspector general en el Liceo de Rancagua (1917-1923). Su alma expansiva ya, en esa época juvenil, empezaba a manifestarse. Así podemos leer en el libro “Motivos Rancagüinos II” que: “El Centro Amigos del Arte se estructuró en Julio de 1917, constituido por cierta cantidad de gente entusiasta por la cultura, hombres y damas, no faltando profesores primarios y secundarios. Sesionaron primero en una pieza del local de La Semana (Independencia 539), y después, en salas de la Escuela Superior N° 2. Había secciones de música, literatura, declamación, pintura, teatro; alcanzó a presentar algunas interesantes veladas en el Teatro O’Higgins, pero no tuvo tiempo para lanzar al público una revista, como eran sus anhelos. Entre sus fundadores están: Dr. Eduardo De-Geyter, Romeo Salinas, Carlos Fuentes Silva, José Pezoa Varas, Francisco Tello G., Joaquín Garay R., Galvarino Valenzuela R., Miguel González Navarro, Ernesto Tapia Hormazal y otros” (Joaquín Garay Reyes, Motivos Rancagüinos, Tomo II, Rancagua, 1968, p. 45).
2.-Sus compañeros del Liceo de Aplicación lo despiden antes de partir a Iquique. En su edición del 6 de marzo de 1928, el diario La Nación daba cuenta de una manifestación en honor de un profesor: “Esta noche, a las 20.30 horas, se verificará en el Restaurant Picart, la manifestación que sus compañeros le ofrecen al ex-Inspector General del Liceo de Aplicación, señor Romeo Salinas, con motivo de su designación para Director del Liceo de Iquique”.
3.-La personalidad del Rector del Liceo de Hombres de Iquique. En la revista liceana “Anhelos” N° 2, del 31 de agosto de 1929, encontramos un artículo con ese título, escrito por J.A.V.O., el que, en seguida, reproduciremos. Textualmente, el citado comentario expresa lo siguiente:
“El Supremo Gobierno no pudo haber hecho una elección tan acertada al asignar al pedagogo señor Romeo Salinas como Director del Liceo de Hombres.
El señor Salinas fue nombrado Director por el señor Ministro de Instrucción Pública el año 1928. Una vez que tomó el señor Salinas el timón de la nave que se le acaba de encomendar bajo la responsabilidad de su gobierno sus primeros pasos fueron encaminados a seleccionar su honorable cuerpo de profesores que lo servirían como sus mejores auxiliares en la obra que nuestro Gobierno le había encomendado desarrollar.
Una vez conseguido su objeto, y ya de acuerdo con su gente, y predispuesto para la lucha educacional, empieza la nave (el Liceo) con rumbo fijo en su marcha que le imprimiera su director con toda su gente, cada cual en su puesto de mando correspondiente.
El señor Salinas para mayor seguridad de su nave que estaba gobernando, hizo una reunión de padres de familia y apoderados de los alumnos de su establecimiento a las 18 horas del día 15 de mayo de 1928, en cuya grandiosa asamblea hizo una amplia exposición de las nuevas tendencias educacionales que ha implantado en la República la reciente reforma. Entre las muchas disertaciones dijo: –que el profesor no es ahora sino un amigo del alumno, que lo enseña, lo aconseja y cuida con afección paternal.
Además dio a conocer en breves frases el plan de trabajo que se había trazado para la buena marcha de esta nave con la colaboración entusiasta de todo el profesorado, en el buen desarrollo que daría a la Institución de sus buenos alumnos que se les confiaran bajo su mando y también pedir la cooperación de los padres de familia.
Hablaron sucesivamente los señores Halley, don Julio Vallejos Orrego y don Alfredo Guzmán García, ofreciendo la cooperación solicitada y con este mismo fin en esa misma asamblea fue elegida la primera comunidad escolar con que los padres de familia prestaban de lleno su cooperación, en esa obra educacional que empezaba este experto dirigente por la marcha de su nave (Liceo).
–Puestos que el señor Salinas ha desempeñado antes de ser nombrado Rector del Liceo de Iquique a entera satisfacción de nuestro Gobierno en la instrucción pública.
Recibió en la Universidad de Chile su título de Bachiller en Humanidades el año 1913. Fue profesor de Estado el año 1917. Más tarde fue nombrado por nuestro Gobierno Inspector General y profesor del Liceo de Rancagua el año 1917 a 1923.
Después fue nombrado nuevamente, Inspector General y profesor del Liceo de Aplicación de Santiago.
El año 1923 a 1928 y estando en este puesto se le nombró Rector del Liceo de Hombres de Iquique el año 1928 en cuyo puesto lo hemos visto actuar con mucho acierto y tino. Su labor es bastante conocida por todos los adelantos que se llevan a cabo en este plantel de educación. Esto es debido a su tesonera y amplia labor desarrollada oficialmente con la cooperación y ayuda de su honorable cuerpo de profesores.
-Con fecha 8 de agosto, y llamado por el Supremo Gobierno se dirigió a Santiago para participar en la gran comparecencia pedagógica a la que asistirán los Directores de toda la República.
Según la nueva Orientación de la institución secundaria que debe desarrollar en el establecimiento que está bajo su mando en esta ciudad, que, desde luego, está asegurado el triunfo para nuestro primer plantel educacional, por ser ya conocida de nosotros sus actividades que inteligentemente ha sabido desplegar hasta el presente el señor Salinas. Labor que ha sido bastante eficiente.
Por nuestra parte, le deseamos éxito y triunfo completo en su cometido. Triunfo que lo hacemos nuestro. J.A.V.O.” (En Revista “Anhelos”, Iquique, 31 de agosto de 1929, año I, N° 2. publicación quincenal, Órgano oficial de la Academia Literaria y Científica del Liceo de Hombres de Iquique”, Director Julio Vallejos Peña, alumno de IV año Humanidades. Biblioteca Nacional).
4.-El congreso pedagógico. Viaje de nuestro Rector a Santiago
En la Revista “Anhelos” se reportea, desde el primer momento y hasta el final, el viaje del Rector Salinas, a la ciudad de Santiago, con motivo de la Conferencia Pedagógica, como podrá observarse, en seguida.
a) “Viaje de nuestro Rector a Santiago. Con el objeto de participar en la Conferencia Pedagógica que se llevará a efecto en la capital, el 8 del presente se dirigió al sur el Rector de nuestro establecimiento, señor don Romeo Salinas.
Antes de ausentarse de ésta, el señor Salinas fue objeto de un sinnúmero de manifestaciones.
Entre ellas podemos citar la que ofreció en su honor el honorable cuerpo de Profesores, y un grupo de educacionistas.
Concurrieron a esta manifestación las siguientes personas:
Señores Romeo Salinas, y señora Adela Stolza, Temístocles Muñoz, Delfín Valenzuela, señoritas Carmen Aroca, Bessie Hodge, Amanda Urzúa, señores Julio Radrigán R., Amador Segura, Enrique Guzmán, J. Torres, H. Bravo, Anselmo Bravo, J. Andrade, C. Cáceres, José M. Godoy, Elefio Salinas y señora, y Elena de Soto, señores Luis Morales y A. Álvarez.
El día 8 en la mañana y auspiciado por nuestro profesor de Castellano, señor Segura, se llevó a cabo en nuestro Liceo un acto de carácter Literario para dar la despedida a nuestro Rector.
Durante la manifestación habló el señor A. Calderón, quien en brillantísimas palabras lo despidió a nombre del 6° año.
El discurso del señor Calderón fue entusiastamente aplaudido.
En los pasajes de cada discurso la señorita Carmen Aroca, ejecutó hermosas piezas musicales, las que también eran cantadas por los alumnos.
Después usaron de la palabra representantes de los cursos inferiores quienes al igual que el primero fueron muy aplaudidos.
Casi al terminar el acto, profundamente emocionado dirigió la palabra a los alumnos el señor Salinas, quien agradeció en hermosos términos la manifestación de que era objeto, y al mismo tiempo exhortó a sus discípulos a que estudiaran con empeño, y cumplieran fielmente con sus obligaciones de estudiantes, que él haría lo posible, y trataría de poner muy en alto el nombre del Liceo.
La personalidad del señor Salinas, dado los vastísimos conocimientos de que está dotada, no podría haber sido más acertada al elegírsele como representante directo de nuestro establecimiento en la Conferencia Pedagógica.
Concurrieron al muelle a despedirlo casi la totalidad de los cursos.
En nombre del IV año de Humanidades y en representación de la Revista “Anhelos” lo despidió a bordo el señor Julio Vallejos P., quien lo hizo formulando los más fervientes votos por su ventura personal, y porque la actuación que le ha de caber al señor Salinas en Santiago dado sus conocimientos, su espíritu de cooperación, su laboriosidad y su carácter de hombre emprendedor sea por demás descollante” (Revista “Anhelos” N° 2, Iquique, 31 de agosto de 1929, documento transcrito de una fotografía que fue autorizada por la Biblioteca Nacional a M. Amparo Salgado).
b) “Anhelos” N° 3, de 30 de septiembre de 1929, publica una fotografía del señor Temístocles Muñoz Vice-Rector, “que ha desempeñado con todo acierto y tino en forma brillante el puesto de Rector en ausencia del señor Romeo Salinas”.
c) En el mismo número de la Revista “Anhelos”, bajo el título “Nuestro Rector Romeo Salinas en Santiago”, se informa que: “especialmente invitado por la dirección del Liceo de Aplicación, donde más antes desempeñara el puesto de profesor de Historia y Geografía, e Inspector General, dio una interesante conferencia acerca de las actividades y vida de nuestra provincia.
El señor Salinas fue muy felicitado por su brillante conferencia”.
d) Asimismo, en el número 3 de la citada Revista se da cuenta de un Telegrama dirigido por el Director de la Revista “Anhelos” al señor don Romeo Salinas.-Buin, cuyo tenor es el siguiente: “Iquique, 4 de septiembre de 1929. “Anhelos” en nombre de todos los alumnos nuestro Liceo felicitan su querido Rector brillantísima conferencia Liceo Aplicación. Saludos.-Vallejos”.
e) Bajo el título “El señor don Romeo Salinas”, en la Revista “Anhelos” N° 4, del 31 de octubre de 1929, se informa que “Procedente de Santiago, llegó el 2 del presente nuestro querido Rector don Romeo Salinas, quien como ya se sabe tuvo una actuación descollante en la conferencia pedagógica. “Anhelos” le saluda respetuosamente, y lo felicita por el éxito alcanzado en la capital”.
f) Por último, en la noticia titulada “Nuestro Rector” contenida en la Revista precedentemente citada, se dice:
“El 2 del presente llegó procedente de la capital, nuestro Rector señor Romeo Salinas, del cual hemos venido anunciando en números anteriores, la actuación descollante que tuvo en la Conferencia Pedagógica.
La misión que llevaba el señor Salinas a Santiago, como se sabe ha alcanzado el mayor de los éxitos.
Es así, como no hace muchos días han llegado bultos con amueblado y útiles de suma necesidad para la enseñanza, y que gracias a las gestiones que hizo logró conseguirlos en su último viaje.
Con la llegada de este mobiliario el Liceo quedará en mejores condiciones. Junto con estos objetos también llegaron varios modernos aparatos de gimnasia en los cuales podrán los colegas desarrollar las enseñanzas físicas.
“Anhelos” en nombre de todos los alumnos de nuestro Liceo se complace en felicitar a su querido Rector por la amplia y activa labor que ha llevado a efecto en todo momento en favor de los educandos. A GOOD BOY”.
5.-Las mejoras introducidas en nuestro Liceo
Julio Vallejos Peña, alumno de III año de Humanidades, en “Anhelos” N° 1, de 15 de agosto de 1929, dijo que: “En la actualidad son tantas las mejoras introducidas en nuestro Liceo durante la corta permanencia que lleva entre nosotros el señor Salinas que nos ocuparía un espacio bastante apreciable para enumerarlas”.
Más concretamente, Freddy Alonso Oyanadel, señala que: “El nuevo rector gracias a sus contactos con Santiago y también a su perseverancia logra conseguir un financiamiento por la suma de $ 210.000, gran suma en esa época para la continuación de la construcción que desde fines de 1887 no se ampliaba el Liceo. Con este dinero se edificó el segundo piso del frontis del establecimiento con la instalación de seis salas de clases. Además, se aprovechó la habilitación del Salón de Actos que servirá para grandes eventos culturales.
Gracias a la reforma educacional y a la calidad del nivel de enseñanza demostrado en nuestro liceo, al tiempo se dotó de un Gimnasio y del Taller de Trabajos Manuales (esta asignatura de Trabajos Manuales venía insertada en dicha reforma).
Al señor Romeo Salinas se le recuerda como un excelente orador, impulsor de la Extensión Cultural y de medidas pedagógicas renovadoras en el Liceo de Hombres de Iquique” (Freddy Alonso Oyanadel, Mi Liceo …120 Años de Historia 1886-2006, Centro Social Cultural Ex – Alumnos del Liceo de Hombres de Iquique, 2006, p. 21).
6.-El Liceo como segundo hogar, hogar que como el propio hay que querer y respetar. El Rector Salinas era un educador nato. No perdía oportunidad para dar lecciones. Una clara demostración de esta vocación se evidencia en una carta dirigida al Presidente del Centro “Andrés Bello” el día de su fundación, cuyo tenor es el siguiente:
“Iquique, 3 de Agosto de 1928.
Señor don Julio Vallejos,
Presidente del Centro Andrés Bello, III año de Humanidades
Presente
Mi querido alumno:
La dirección del Liceo ve con mucho agrado las iniciativas del III año de Humanidades y espera que los alumnos del Centro Literario y todos los del curso sabrán ser siempre jóvenes empeñosos y esmerados en el cumplimiento del deber.
Confía asimismo en que el ejemplo dado por este curso a los demás alumnos del Colegio para que vean en el Liceo el segundo hogar, hogar que como el propio hay que querer y respetar.
Muy atentamente saluda a Ud.
Romeo Salinas S.
Director”
(Revista “Anhelos”, N° 1, de 15 agosto de 1929).
7.-Su participación en el Directorio del Centro de Extensión Cultural y en la Universidad Industrial
En la tercera memoria (abril de 1928-abril de 1929) de la Universidad Industrial, consta que “en sesión ordinaria del 12 de Mayo de 1928, el Directorio del Centro de Extensión Cultural, recientemente elegido y compuesto por los señores: Manuel Melo, Emiliano Ávila, Hernán Miranda, Dr. Elguín, Juan Garfias, Sta. Delfina Valenzuela, Emilio Vigouroux, Romeo Salinas, Evaristo Molina, Héctor Urízar y Alfredo Philipp procedió a constituirse y a elegir mesa directiva” (Centro de Extensión Cultural, fundado el 27 de agosto de 1924, Memorias y Anteproyecto de la Universidad Industrial, Iquique, 1929, p. 5. En este mismo texto, más adelante, se da cuenta que “entre las veladas verificadas durante el año son de mencionar, especialmente, la que se celebró en el Teatro Municipal en Julio del año pasado en conmemoración del aniversario de la Universidad, y que fue presidida por el señor Intendente de la Provincia, don Luis Caballero, acompañado de todo el cuerpo directivo del Centro, director provincial de educación, don Eliseo Sepúlveda y Rector del Liceo, don Romeo Salinas, y director del Instituto Comercial, don Emilio Vigouroux” (ob. cit. p. 15).
8.-La obra literaria del Rector Romeo Salinas
Nuestro Rector adquirió un merecido reconocimiento por su obra literaria, especialmente por sus publicaciones: “Bajo la sombra del canelo: tradiciones y leyendas sobre plantas chilenas” (1942), “Las leyendas del mundo vegetal” (1940), “Aillaquillén la hija de las nueve lunas: Leyenda del Lago Villarrica” (1944), “Poesías de la antigua China” (1947-1949), “A través de cien años: Buin: 1844-1944” (1944).
Sobre su obra “Bajo la sombra del canelo”, Carlos Yáñez Bravo, comenta que “desde que leemos la introducción de esta obra nos orientamos de inmediato acerca de la idea predominante del escritor y el espíritu que animó sus páginas, las que nos llevan en forma agradable y galana por el vasto y misterioso campo de nuestras leyendas vernáculas, que encierran, en sus variadas formas, toda el alma de nuestra raza aborigen”. “Bajo la sombra del canelo” es un canto a la liturgia misma de los adivinos, las machis y en general al conjunto de ceremonias destinadas a precaver a las tribus aborígenes de la acción de los brujos, hechiceros y pillanes, y como un medio de ahuyentar las enfermedades que asolaban con más frecuencia a la colectividad”. “Las páginas destinadas a nuestro canelo constituyen una interesante síntesis, escrita con fluidez y elegancia acerca del sortilegio que ejercía el ramaje del más hermoso de los árboles chilenos sobre las mentes primitivas de esos hombres que, a pesar del espíritu guerrero que siempre se les ha atribuido, encontraron en el follaje del canelo, con su fragancia exótica y enervante, el símbolo de la paz y la concordia humanas”.
“Literariamente se hermana con su obra anterior intitulada “Las leyendas del mundo vegetal” (Carlos Yáñez Bravo, La Nación, 25 de octubre 1942).
9.-Reconocimiento público. En la ciudad de Santiago, comuna de Ñuñoa, una de sus calles, lleva el nombre de nuestro Rector. En la página de la Ilustre Municipalidad de Ñuñoa, en la búsqueda de calles, puede leerse, lo siguiente: “ROMEO SALINAS SALINAS Nacido en el año 1893. Profesor de Historia y Geografía. Rector del Liceo de Iquique y del Liceo Amunátegui. Autor de: “Leyendas del Mundo Vegetal”, “Bajo la Sombra del Canelo”, etc.”
Lo último que no podemos dejar de manifestar, es la felicidad de sentir que, a la sombra de don Romeo Salinas, un Rector de estatura excepcional, nuestro Liceo, nunca dejará de ser el más importante de los establecimientos de instrucción secundaria que haya habido en Tarapacá.
Santiago, junio 7 de 2018.-
(*) Fotografía Revista “Anhelos” Biblioteca Nacional.