Cuentos creados por alumnos/as de la Escuela F-62 sobre Camiña:
I. Un día aburrido paseaba con mi amigo en bicicleta. Como me aburría fuimos al río pero como siempre, estaba desierto todo. Lo único que había era un cactus en el cerro.
Empezó a hacer viento, así que decidimos irnos a mi casa. Cuando estábamos llegando, justo el viento botó un muro y la gente estaba muy asustada, además la ambulancia nunca llegaba.II. En Camiña hay una chacra que da frutos, la riegan con agua. En Camiña hay animales como el cordero, le dan de comer alfalfa.
Camiña es bonito, tiene chacras que dan frutos, las que riegan con agua mientras dan de comer a los animales. Aquí hay siembras bonitas, semillas de muchos tipos, como zanahorias, zapallos, ajos… III. Camiña es muy lindo. Las personas aprovechan de pastear sus llamas mientras cosechan zanahorias. Las bañan en el río. Los trabajadores se levantan temprano a alimentar a sus animales. Cuando es diciembre, sacan los ajos.
IV. Había una vez un río que se llamaba sangre, tenía plantas, agricultura; y de sus costados se desprendían largos montes.
Un día llegó una persona al pueblo, muy educada, que quería comprar animales y cebollas. Él se alojó en una casa en la que nadie quería estar porque penaban. Las personas que vivían en Camiña le advirtieron que no tenía que ir, pero él no hizo caso.
Un día sintió que lo penaban y salió corriendo sin nada. Se fue y nunca más volvió a Camiña.
V. Una vez en Camiña había un campo lleno de tierra maldita. Un día un caballero plantó justamente ahí, y resultaba ser que esa tierra era un abono asombroso para su chacra.
En la pampa estaba parado un cordero, que en realidad no era un cordero si no que era el diablo que cosechaba sus siembras y se comía todas sus semillas, por esto era que la agricultura era tan próspera.
En el oeste de la cordillera habian conejos llenos de sangre que se había comido el chupacabras, pues a él, le encantaba la sangre. En ese recinto años más tarde, crecieron plantas y árboles sin fin. Este terreno estaba ubicado tras una casa en Laimisiña.
VI. Había una vez una persona que tenía varios libros donde se hablaba del «Condenado». Un dia esta persona encontró una gallina a los pies del cerro Laimisiña. Esta gallina ponía huevos de oro y la persona que la encontró se convirtió en el más rico del mundo.
El señor que la encontró pensaba que dentro del ave había una mina de oro y la mató para ver, pero no había ninguna mina y volvió a la pobreza. Luego, se le escaparon los conejos y no tenía más animales. VII. Érase una vez una persona a la que le gustaba ir a las chacras, en los montes, a sembrar ajo. Pero un día echó una semilla muy extraña que le había regalado un viejo que pasó por la ciudad.
La persona, muy preocupada por su siembra, descubrió que al cabo de unos días creció una planta muy bonita. Él la sacó y se la fue a mostrar a su vecino, que era un ser muy viejo y sabio.
Él le dijo: » Deshazte de esa planta inmediatamente porque te traerá mala suerte». Sin hacer caso, el hombre se llevó la planta a su camioneta y saliendo por la carretera se le cayó en barranco encima.
VIII. «Ajos chilotes, ajos de Camiña». Creación colectiva
¿Por qué los ajos se siembran en las chacras?, ¿Por qué la zanahoria es grande?, ¿Por qué los camiñanos nunca van a Chiloé? Tal vez no les gusta mucho el agua.
IX. En Camiña se acostumbra a que lleguen muchos y muchos niños a la escuela, porque hay personas. Sus padres son de agricultura, muchos plantan zanahorias y choclos, tienen muchos animales y beben mucha agua del río.
Mucha gente confunde a Camiña con un campo, pero es una quebrada con muchas plantas donde todos disfrutan la vista y poca lluvia que tiene Camiña.
X. Había una vez en Camiña una niña, vivía cerca de una cruz roja. En este lugar pasan cosas extrañas, una vez se perdió un niño.
En un cerro, el Laimisiña, hay un pájaro que habla sobre las personas. Una de esas personas vio al condenado. Le llevaba comida para la chacra, pero le dio un ataque al corazón. Luego apareció una luz sobre el Laimisiña.
XI. «Mi abuelo dice que andan duendes en la chacra», Creación colectiva
Porque los vio en la noche cuando fue a regar, volvió pero no vio nada.
Un día el abuelo vio un duende de color rojo.
Relatos publicados en «Desarrollo artístico y cultural de Camiña», p. 25-36
Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, 2011.