Barrio San Carlos

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El poblamiento del barrio San Carlos se puede enmarcar dentro de un contexto nacional, en donde a mediados del siglo XX surgieron diferentes procesos de tomas de terreno en todo Chile. Producto de una crisis habitacional, surgida por el crecimiento de las ciudades y de comunidades enteras que llegaron a habitarlas desde zonas rurales. Resulta necesario explicar este fenómeno para describir como fue el proceso en la ciudad de Iquique y específicamente con los barrios San Carlos, Ferronor y Villa Santa María.

La toma de terreno iniciada en San Carlos es contemporánea a la del Zanjón de la Aguada, en 1957 y a la toma de la población La Victoria (1953), que fueron las primeras poblaciones “callampas” de Chile y marcaron un precedente, en la historia de los procesos de tomas de terreno en Chile.

La región de Tarapacá estuvo marcada por el desplazamiento migratorio de población desde zonas rurales hasta las ciudades durante la primera mitad del siglo XX, específicamente por el movimiento demográfico desde la pampa hasta la ciudad de Iquique, motivado por el cierre de oficinas salitreras. La ciudad no estaba preparada para recibir a tanta gente, acrecentando el problema de vivienda, entonces una de las primeras estrategias de poblamiento popular fue vivir en conventillos. Sin embargo la especulación de los precios hizo insuficiente esta estrategia.

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El barrio San Carlos nace como una toma de terreno el año 1952 en Iquique, y no fue la única toma que se levantó durante esos años, por eso resulta imprescindible observar los fenómenos que impulsaron los procesos de tomas de terreno, los cuales se plantean como actores sociales, que no existía en ese tiempo, solo a imagen del obrero o sindicalista, se toma lo urbano y habitacional como campo de acción para demandar, exigir, usar, vivir, efectuar, aplicar, derechos. Y todas estas acciones se fundamentan en el derecho a la vivienda. La toma, como acción directa portadora de una legitimidad basada en la necesidad, y en la noción de derecho a la vivienda, fue una acción colectiva organizada que significó, en la práctica, una fractura radical con la lógicas institucionales y con el principio fundamental de las democracias liberales, a saber, la propiedad (Salazar, 2006).

Entonces gracias a esos primeros pobladores existe actualmente el Barrio San Carlos, Ferronor y Villa Santa María. Ellos fueron quienes se organizaron con un objetivo común, como ciudadanos con derecho a la vivienda y no descansaron hasta cumplir sus metas. Hoy el barrio tiene varias generaciones de familias, tiene organizaciones que funcionan, tiene identidad propia y es una muestra viva de la historia y memoria Iquiqueña.

El Auge Pesquero

Para contextualizar el surgimiento del barrio y sus habitantes tenemos que referirnos al auge pesquero en Iquique durante la década del ’60. Después que decae la industria pesquera como un polo de desarrollo, y absorbe a la mano de obra disponible en ese momento.

Fue tal el auge pesquero que se crean empresas, 16 pesqueras aproximadamente en la ciudad y todas emplazadas en el sector norte. Estas empresas se dedicaban a la venta de aceite de pescado, al procesamiento de la materia prima, a la producción de harina de pescado. Por lo mismo hubo mucha mano de obra de las poblaciones aledañas como El Colorado, San Carlos, Ferronor. Muchos vecinos fueron tripulantes y trabajadores de las pesqueras. Esos años fueron importantes para el barrio, que se había formado no hace mucho tiempo. Los vecinos crearon una identidad especial, mezcla entre la actividad industrial como las pesqueras, mataderos, el ferrocarril, los deportes y la religiosidad.

Proceso de Formación de Barrio

San Carlos es un barrio formado por antiguos Iquiqueños, y donde se vive la identidad activamente, desde su religiosidad, en la vida comunitaria, sus carnavales y con el orgullo de pertenecer a uno de los barrios más emblemáticos de Iquique.

La población que hoy conocemos comenzó con una toma de terreno durante la década del ‘50 en el sector norte de la ciudad. En terrenos cercanos al ferrocarril, los mataderos y el cementerio. En el año 1952 se oficializa el barrio, a partir de la conformación de la junta de vecinos “San Carlos”, en homenaje a Carlos Lay Galleguillos, quien fue la primera persona en llegar a la toma. San Carlos fue denominada como la población número 5 en la ciudad en ese tiempo.

El proceso de legalización de las viviendas fue de manera personal, cada vecino consiguió sus títulos de propiedad. De hecho existen casas que no tienen título de dominio aún. En otros casos fue de forma colectiva, por ejemplo en el año 1967 la municipalidad donó terrenos para una parte de la población y los terrenos fueron regularizados por medio de subsidios en un trabajo en conjunto con SERVIU. En el año 1977 se realizó un nuevo proceso de tomas, en los terrenos de Esteban Yuras, quien era dueño de una ganadera.

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Cada familia construyó su casa de la forma que pudo y con los medios que tuviera disponible, al principio de materiales livianos y de madera. Con el tiempo y a través de la solidaridad entre los vecinos se pudo levantar uno de los barrios más importantes en cuanto a la actividad religiosa, al patrimonio e identidad nortina.

Podemos resaltar el nivel de compromiso y unidad de los vecinos al momento de formar una comunidad, al momento de construir las casas, al convivir diariamente entre iguales. Las personas eran muy unidas entre sí.

Fuente: MINVU, I. Municipalidad de Iquique. Libro Historia Barrio San Carlos – Ferronor – Villa Santa María.

Programa Quiero Mi Barrio, Iquique 2015. Imágenes Barrio San Carlos

Barrio San Carlos

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